La Muela (2.104)

ASCENSIÓN DESDE EL PUERTO DE NAVAFRÍA

POR LA CUERDA

La Muela es el dosmil más oriental del Guadarrama. Aquí empieza la Somosierra: los relieves se hacen aún más suaves y los pinares llegan casi a la cuerda, tan amplia que, en algunos lugares, el llano culminante llega a tener un kilómetro de ancho y se pierde la sensación de cresta. Sin embargo, desde los bordes de ese lomo, donde el terreno se desploma hacia el llano, están las mejores vistas del Valle del Lozoya y la estepa sin límites al norte. Ambas vertientes están pobladas de grandes masas de pino albar, a cuya sombra prosperan los helechos; y, aunque son bosques muy explotados y atravesados por una densa red de pistas, conservan su encanto.

Esta es la ruta más utilizada para subir a la Muela. Desde el Puerto de Navafría, desnivel y distancia son cortos y no hay dificultad, siguiendo el carril que va siguiendo el cordal. Aunque invito a salirse del mismo para visitar los dos Reajos, Capón y Alto, que, con muy poquito esfuerzo más, nos van a premiar con unos panoramas estupendos, que van a completar los de la cumbre en aquéllas direcciones en que el terreno los tapa en parte.

La Muela y el lomo por el que transcurre la ascensión, vistos desde el oeste.

SITUACIÓN:

  • Zona: Sierra de Guadarrama (Sistema Central)
  • Unidad: Somosierra
  • Base de partida: Lozoya (Madrid)

ACCESO: El Puerto de Navafría está 90 km al norte de Madrid, por Lozoyuela y Lozoya. Puedes calcular un itinerario desde tu lugar de origen al punto de partida de la ruta en el siguiente link a GoogleMaps.

 OTROS DATOS:

  • Cota mínima / máxima: 1.774 / 2.104
  • Mi tiempo efectivo: 3h06
  • Mi tiempo total: 3h28
  • Dificultades: Ninguna. Itinerario por caminos o terreno cómodo.
  • Track para descargar en Wikiloc

Mapa tomado del visor Iberpix. ©INSTITUTO GEOGRÁFICO NACIONAL DE ESPAÑA

LA RUTA: Salir del Puerto de Navafría por el carril que recorre la cuerda al NE. Al ver a la derecha (SE) la cima de  Reajo Capón, desviarse momentáneamente del camino para pisarla. De vuelta en el mismo, al iniciar la subida en el collado subsiguiente, tomar un desvío menos marcado a la derecha (E), para visitar el vértice de Reajo Alto. Trs disfrutar de su panorama, girar a la izquierda (NO) para tajar, a través del matorral, muy llevaderro, hasta la La Muela.

Dejar la cumbre por una senda que se dirige al sur y, enseguida, da con el carril del cordal. Seguirla ahora en sentido contrario a la ida, al SO, hasta el Puerto de Navafría.

Croquis de la ruta sobre ©GOOGLE EARTH

COMENTARIOS: Poco hay que decir sobre esta ruta, tan corta y fácil, salvo que esa falta de exigencia no va a restar un ápice a la belleza del panorama que se contempla desde uno de los mejores miradores de estas sierras.

RELATO GRÁFICO:

En el Puerto de Navafría, tomé un empinado carril que remonta el lomo del cordal al nordeste.

No llevaba ganados cien metros, cuando salí del bosque. A mi espalda, el sol doraba el vecino Pico del Nevero y, al fondo, Peñalara.

La pendiente cedió en un priemr rellano, llamado Alto de la Pinarilla, desde el que se ven ya los siguientes hitos de la ascensión, el Reventón y Reajo Capón.

A la derecha, se apreciaba cómo los vapores cubrían la llanura más allá de la boca del Valle de Lozoya.

Al otro lado, el tiempo estaba más claro hacia la submeseta norte.

Ya en la cima del Pico del Reventón, el panorama al oeste se había ampliado con las Cabezas de Hierro y las Guarramillas.

Siguen una bajada y posterior subida a Reajo Capón, ambas cortas y poco empinadas, con lo que la cosa es llevadera.

La cima de Reajo Capón queda a la derecha (SE) del carril. Me desvié para alcanzarla a través de la hierba. Merece la pena el pequeño rodeo por el panorama, que supera al de la cumbre hacia...

... el suroeste. Allí era visible la cabecera del Lozoya, abrazada por la Cuerda Larga y el cordal principal, donde destacaban...

... Peñalara y...

... el Nevero.

Al nordeste, las crestas de Ayllón contenían la bruma.

Proseguí por la cuerda, derivando a la izquierda según me convenía, a fin de converger con el camino.

De nuevo en él, podía ver el collado que se abre entre el Reajo Capón y el Alto, siguiente punta de la jornada. Nada más pasar su punto más bajo,...

... dejé el carril que venía siguiendo, por un desvío menos marcado que sale a la izquierda (E) y, al llegar...

... junto un murete en la divisoria, retoma la dirección del cordal.

Antes de llegar a la cima de Reajo Alto, el camino se difuminó hasta desaparecen al paso por una pradera. Teniendo a la vista el hito geodésico, me dirigí a él a través del matorral, denso pero lleno de rastros del paso de ganado. 

Desde el vértice Reajo Alto, descubrí el cordal que corre al nordeste, hacia las montañas de Ayllón.

Más a la derecha, al este, el Ocejón y la Sierra del Rincón sobresalían de la bruma.

Siguiendo con la vuelta, la Sierra de la Cabrear y Mondalindo al sur.

Al suroeste, la vista de la cabecera del Lozoya quedaba interrumpida por Reajo Capón.

Al nordeste quedaba la cima verdadera de Reajo Alto, un par de metros más alta que el vértice y sin interés. Más allá, a la derehca en la foto, estaba La Muela, apenas distinguible. Pero, caminando en esa dirección a través del matorral,...

... pronto pude ver la depresión intermedia y el cabezo en que culmina esta montaña. Seguí caminando hacia allí, alternando cortos tramos de hierba y matorral. También crucé un par de carriles.

Desde la cumbre de La Muela, se domina un buen trozo de llanura al norte. Incluso se adivinaba en el horizonte, a la derecha, la cresta del Urbión. Girándome a ese lado,...

... un segmento del cordal mostraba su vertiente norte y, sobre él, la Sierra de Ayllón, con el Pico del Lobo y el Cerrón bien identificables.

Al sur, la perspectiva quedaba tapada por el Reajo Alto; éste es el motivo de visitar las varias puntas que coronan esta extensa culminación.

Tampoco la vista era muy buena hacia el fondo del valle; sólo Peñalara se veía bien. Y tampoco el Nevero mostraba su mejor ángulo. Abandoné la cima caminando en esa dirección, al suroeste, entre matorral abierto.

Enseguida, encontré el cabo de un camino. Es el mismo de la ida y, por tanto, sólo me quedó seguirlo para volver al Puerto de Navafría.

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