ASCENSIÓN DESDE EL CARDOSO DE LA SIERRA

POR LA LOMA DE LA DEHESA Y COLLADO DEL AGUA FRÍA (RUTA NORMAL)

El Macizo de Ayllón, que se extiende entre las provincias de Madrid, Guadalajara y Segovia, está formado por un conjunto de sierras dispuestas en forma de peine. El Cerrón es su segunda cumbre más alta; se eleva en medio de la “púa” central, para mí, el corazón del conjunto. También es el pico más alto enteramente situado en la provincia de Guadalajara. Se trata de una montaña altiva pero de formas redondeadas. Como todas los de la zona, se yergue sobre profundos valles poblados de bosque y sus laderas está cubiertas de matorral y pasto hasta casi la culminación, donde aflora la pizarra en forma de vistosos crestones.

La ruta consiste en encaramarse a la Loma de la Dehesa y seguirla al norte, siempre por camino, hasta la cima del Cerrón. El regreso, por una vez, lo hicimos por el mismo sitio.

Vistos desde el sur, la pirámide cimera del cerrón se eleva por encima de El Cardoso de la Sierra

SITUACIÓN:

Zona: Macizo de Ayllón (Sistema Central)
Unidad: Sierra de Ayllón
Base de partida: El Cardoso de la Sierra (Guadalajara)

ACCESO: El Cardoso de la Sierra es un municipio situado en el extremo noroeste de la provincia de Guadalajara, en medio de las estribaciones meridionales de la Sierra de Ayllón. No es necesario salir caminando del pueblo; nos podemos ahorrar un trecho remontando una pista circulable que sale de la carretera un poco al este del núcleo urbano y se dirige al norte, remontando el Arroyo del Ejido. Al cabo de unos 500 m, hay un desvío cerrado con barrera a la derecha (E); por él, comienza la excursión. Puedes calcular un itinerario desde tu lugar de origen al punto de partida de la ruta en el siguiente link a GoogleMaps.

Pulsa aquí para consultar la tabla MIDE

OTROS DATOS:

Cota mínima / máxima: 1.332 / 2.196
Mi tiempo efectivo: 3h43
Mi tiempo total: 4h15
Dificultades: Ninguna. Itinerario por caminos.
Track para descargar en Wikiloc

Mapa tomado del visor Iberpix. ©INSTITUTO GEOGRÁFICO NACIONAL DE ESPAÑA

LA RUTA: A partir de El Cardoso de la Sierra, remontar la pista que asciende por las Hazas de la Ladera hasta alcanzar la Loma de la Dehesa. Allí, girar a la izquierda (NO) para pasar a seguir el cordal, rodeando picos secundarios y zonas accidentadas. Pasado el Collado del Agua Fría y antes del de La Ortigosa, dejarlo por una senda señalizada que sale a la derecha (N) y asciende en diagonal por la ladera oriental hasta la cima del Cerrón. Regresar por el mismo camino.

Croquis de la ruta sobre ©GOOGLE EARTH

COMENTARIOS: Esta es la ruta más corta y accesible para ascender al Cerrón, con menos de mil metros de desnivel y permitiendo llegar a la cima sin dejar de pisar camino, mejor o peor pero camino, y guiado por señales y carteles. Aunque muy poco aventurera, por tanto, no deja de ser bonita, por su variedad de entornos y carácter panorámico desde que se gana la cuerda. Pero, incluso en días como éste, con tan escasa visibilidad, tiene su encanto.

La idea inicial era un poco diferente; consistía en subir al Cerrón yendo estrictamente por la cuerda, incluyendo tocar las cimas de Santuy y Picaño, pero nos encontramos sin apenas visibilidad y un desagradable viento helado en cresta. Como, por otro lado, las condiciones no eran insoportables ni amenazaba tormenta o algo parecido, decidimos hacer la cumbre, ya que habíamos ido hasta el Cardoso, pero por lo más corto y cómodo; es decir, sin dejar pistas y caminos. Así la ruta no es más que un paseo, largo pero paseo, aunque hay que tener en cuenta que se van a superar en bastante los dosmil metros de altitud e ir equipado y comportarse en consecuencia.

Por otra parte, aunque pisamos nieve durante la mayor parte de la subida, espesor y consistencia eran tan escasos que, a los efectos de dificultad, esfuerzo y tiempos, fue como si no hubiera y por eso considero que las condiciones son estivales, tanto al calcular el MIDE como al dar mi propia impresión de dificultad. Como en otras ocasiones de visibilidad nula en cumbre, he incluido fotos antiguas con lo que se ve; en este caso, datan de febrero de 2015.

RELATO GRÁFICO:

En una mañana sombría, comenzamos a caminar por la pista que remonta en lazadas el bosque de las Hazas de la Ladera.

Al salir del robledal ante la loma del Saltadero, vimos que las nubes tapaban la cresta.

Mirando atrás, el panorama era semejante más allá del pueblo del Cardoso y el monte Bañaderos.

Ya muy arriba, la pista se asomó al este y pudimos ver, al fondo del corte del Río Jarama, un brillante techo de niebla que se extendía sobre el llano de Guadalajara.

Al culminar la Loma de la Dehesa, la pista se bifurca. Nosotros continuamos girando a la izquierda (NO) para...

... seguir la cuerda, ahora en una subida mucho más gradual. Al principio, mientras rodeábamos el Santuy por el este, alternamos trechos por zonas despejadas con...

... otros entre pinos. La pista estaba ya para entonces cubierta totalmente de nieve, pero sin consistencia y con tan poco espesor que era como caminar en seco. Pero con alfombra.

Por momentos, parecía que la nube se levantaba y llegamos ver algo hacia el valle de las Canalejas, que llevábamos a la derecha.

Pero enseguida se volvía a cerrar. A partir del Collado de la Calahorra, dejamos atrás definitivamente el arbolado y, sin la protección del Santuy, recibimos un viento intenso y helado, por si necesitábamos más incentivo para limitarnos a caminar por la pista y dejar el cresteo que habíamos planeado para otro día.

Luego, pasamos a rodear el picaño. Allí predominaba en el entorno la roca, embellecida por la nieve helada en las fisuras.

El terreno se volvió a ensanchar en el Collado del Agua Fría, donde, además, la niebla se adensó aún más.

Poco después, cuando la pista hace un giro a la izquierda casi en redondo, la dejamos por la derecha (N), por...

... una senda señalizada, que abría un corte estrecho pero nítido en el matorral, remontando en diagonal la ladera hacia la cumbre.

Aquí, a poco de dejar la pista, hizo intención de despejar hacia la cresta del Picaño, pero...

... fue otro falso aviso. Enseguida volvió la nube a adensarse. Además del corte nítido, las marcas ayudaban a seguir la ruta.

Y así llegamos a la cima, donde el vendaval nos golpeó con mayor fuerza aún. Además, la visibilidad era nula, o casi.

Desde luego, nada del magnífico panorama del Pico del Lobo que se suele disfrutar desde aquí (foto 2015).

Y, hacia el Tres Provincias y la cabecera del Jarama (2015),...

... sólo por unos segundos llegamos a distinguir la caída al valle.

Con todo esto, no duramos mucho en cumbre antes de emprender el retorno, por la misma ruta de subida.

Pero parece que la constancia iba a tener premio. A poco de iniciar el descenso, la nube se fue levantando y comenzamos a ver ante nosotros el rellano del Agua Fría con la masa oscura de la Sierra del rincón al fondo.