Moradas (1.381)
ASCENSIÓN DESDE NAVALTORIL
RUTA DIRECTA DE LA VERTIENTE NORTE, CON EL CASTILLAZO (1.339)
Los de Moradas y el Castillazo son los dos picos
que culminan la Sierra de Hiruelas, pequeño cordal del sector central de los
Montes de Toledo, que se alza entre las comarcas de La Jara y Rincón de
Anchuras. Se trata de un monte característico habituales de la zona, con ancho
cordal y laderas empinadas, pobladas por pinares y robledales interrumpidos
ocasionalmente por canchos y pedreras. Con un entorno más húmedo de lo
esperable en esta región, posee el atractivo de una notable belleza natural,
además del variado panorama que se domina desde la cresta.
SITUACIÓN:
- Zona: Sector Central de los Montes de Toledo
- Unidad: Sierra de la Hiruela
- Base de partida: Navaltoril (Toledo)
OTROS
DATOS:
- Cota mínima / máxima: 740 / 1.381
- Mi tiempo efectivo: 4h06
- Mi tiempo total: 4h57
- Dificultades: Muy fácil. Considerables tramos campo a través por terreno incómodo (pedregoso) y, a veces, a través de bosque sin referencia visual, pero con la de la pendiente. Hay que ayudarse de las manos en un destrepe de seis metros lejos de ser vertical y con buenos apoyos (I); es probable que se pueda rodear.
- Track para descargar en Wikiloc
LA RUTA: Salir de Navaltoril por la carretera que se
dirige, al oeste, hacia Robledo del Mazo. Al poco, al ver a la izquierda (S) un
puente sobre el Río Gébalo, dejar el asfalto y bajar a cruzarlo, siguiendo un
estrecho trazo en la hierba. Al otro lado, dejar ese rastro, que sigue la
corriente, para remontar la ladera a través del pasto, hasta dar con otro
sendero, muy deteriorado, que sube llevando a la izquierda un murete y una
torrentera. Se trata Camino de las
Tejadillas que, tras cruzar una pista, mejora ostensiblemente y se introduce
en el pinar. Tras remontar directamente la ladera un rato, el camino se
introduce en un barranco y se va difuminando hasta desaparecer. Aunque el
bosque es denso, se cuenta con la referencia indudable del abrupto tajo. Cuando
el barranco se abre, continuar remontando la ladera, derivando a la izquierda
(SE), tomando ahora como guía una gran pedrera que se veía desde abajo. Al
acabar el cantizal ante unos tejos, continuar manteniendo la dirección, y
acabar de superar la ladera hasta la cima de las Moradas.
Seguir la cuerda a la
izquierda (O), primero por un campo a través no demasiado incómodo y luego por
camino, hasta el collado inmediato (1.272). Dejar allí el carril por la derecha
(NO) para continuar por hacia el Castillazo,
defendido por varios escalones de roca, que presentan todos discontinuidades
que permiten se superarlos caminando. Continuar por la cuerda al oeste (NO)
hasta dar, en el Collado del Castillazo (1.297), con un camino que, tomado a la
izquierda (S), conduce a una pista que, a la derecha (SO), lleva al Castillazo Oeste, punta más baja, pero
con mejores vistas que la principal.
COMENTARIOS: Esta ruta,
que no plantea grandes dificultades técnicas ni es muy larga, resulta, sin
embargo exigente. Circula una considerable cantidad de tiempo sin senda y por
un terreno pedregoso irregular, que requiere cierta costumbre. Por otro lado,
la orientación, sin representar un problema crítico, requiere buena
interpretación del terreno para alcanzar la cresta no muy desviados de cumbre.
Respecto al sentido de la ruta, lo escogí así, pasando por el pico más alto
primero, porque creía que la bajada sería menos dificultosa por el lado del Castillazo.
No es así, exactamente, pero sigo creyendo que es más conveniente subir por el
bosque y bajar por el cortafuegos, incluso aunque haya que destrepar el resalte
que hay por debajo del Collado del Castillazo. Además, es probable que se pueda
bajar caminando ampliando el rodeo, aunque el destrepe, por donde lo hice, es
sumamente fácil y poco expuesto.
En fin; otra bonita
excursión por los Montes de Toledo, en un entorno sorprendentemente húmedo para
lo que uno espera por esta zona, con su punto asilvestrado y un amplio y
variado panorama.
RELATO GRÁFICO:
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